Aunque, en general, la tendencia Y2K ha quedado casi desterrada en cuanto a ropa se refiere en favor de prendas minimalistas y sofisticadas, no es el caso de su accesorio estrella: las zapatillas.
Aunque la Generación Z se empeñe en volver a los 90 a golpe de tendencias que horrorizan a los millennials, lo cierto es que el resto de la población posamos nuestra mirada en los años 70.
Las zapatillas blancas de hombre son nuestro comodín del público. Cuando no sabemos qué calzarnos, ahí están, con una imagen reluciente esperando a ser usadas, sea de día o de noche.