Los investigadores descubrieron que esta práctica está vinculada a una menor inflamación y a la prevención de enfermedades orales, factores que influyen en la salud cardiovascular.
En 2016, cuando tenía 21 años, Tina Holt sufrió un accidente cardiovascular que le cambió la vida. La mujer trabajaba como paramédica y había regresado de comer con sus amigos cuando sintió ...